Una de las mejores cosas para una empresa
es mejorar su productividad
Porque sus costes se reducen, su rentabilidad aumenta y su competitividad mejora.
Pero ahora mismo, la realidad de algunas empresas se parece más a esta:
“Si tengo que reducir la jornada laboral a la fuerza,
u ofrecer medidas más flexibles de trabajo,
lo mismo en 6 meses, estamos cerrando la empresa”
Lo que te voy a contar ahora, va a ser algo en lo que no vas a dejar de pensar en los próximos días. Porque, probablemente cambie la productividad en tu empresa.
Empiezo por situarnos,
El problema de la reducción de la jornada laboral
Hace poco hablaba con un amigo empresario.
Dirige una empresa con 53 empleados.
Y estaba realmente agobiado.
Me decía, que si volviera atrás, no montaría una empresa ni loco.
Pero por otro lado, le llenaba de orgullo dar empleo a tantas familias.
El problema era la más que probable exigencia del Gobierno de reducir la jornada laboral.
Estaba hecho un lío.
––Si finalmente hay que reducir las horas de trabajo, y no se reducen los salarios, el costo por hora por empleado será mayor. Y no vamos tan sobrados de beneficios.
Pero aún añadió una circunstancia más, que hacía el problema aún mucho mayor.
––La competencia en el sector es alta. No hay suficiente personal cualificado. Y algunas empresas grandes, están ofreciendo condiciones laborales a las que yo no puedo llegar.
Estaba intranquilo. Por el enorme riesgo de que alguno de sus mejores empleados, se acabasen yendo a otras empresas. Entonces, el roto sería importante.
Y además, perjudicaría aún más a la rentabilidad.
Dicho esto…
Qué hacen las “otras empresas” a las que les va mejor
Continuamos hablando de que esas “otras empresas”, seguro que tenía otros problemas. Y también sus temores.
Aunque su diferencia con las otras empresas, era que los segundos, al menos estaban haciendo algo.
El caso es que al avanzar la charla, me contó algunas experiencias de otros empresarios con los que tenía cierta relación.
––Hace poco, en una reunión de empresarios, me contaron una experiencia bastante positiva, en una empresa en la que estaban implantando la reducción de la jornada laboral.
Al parecer, según me contaba, la reducción de la jornada laboral no afectaba al salario de los trabajadores. Y la experiencia estaba siendo positiva:
√ Había producido un impulso grande en la motivación del personal.
√ Los profesionales eran más leales y comprometidos. Y no pensaban en cambiarse de empresa.
√ Los empleados se focalizaban más en resultados y en valor, por disponer de menos tiempo. Y ellos mismos eliminaban muchas tareas innecesarias y distracciones.
√ Curiosamente, el ambiente de trabajo era mejor. Lo que entendía que era muy positivo a la hora de retener el talento.
√ Incluso dijo, que los números salían. Y que algún mes, estaban produciendo ligeramente más, de lo que lo hacían antes.
Aún le notaba demasiado preocupado. Por lo que aunque le hubiera dado algunos datos sobre los resultados de estudios en implantación de la jornada laboral reducida, no creo que le hubieran servido mucho…
Ya sabes, investigaciones del tipo:
Así que, le hablé de otras cuestiones bastante evidentes.
Le conté, que cuando una empresa por propia voluntad, reduce la jornada laboral, los empleados se sienten valorados. Ya que perciben que su bienestar es una prioridad para la empresa.
Lo perciben como un regalo.
Como un privilegio.
Entonces tienen una profunda sensación de reciprocidad y buena voluntad hacia la empresa.
Esto es algo inherente al ser humano.
Y el resultado es que los niveles de colaboración y trabajo en equipo se elevan. Se produce un sentimiento común de ayudarse entre todos.
Porque detrás de todo subyace el propósito, de no tener que volver a la rutina de más horas de trabajo de antes
En resumidas cuentas…
No le debió parecer mal todo lo que hablamos.
Porque me contrató mi formación básica de una jornada, de mejora de la productividad para todo el personal de su oficina.
Y es que aún no te lo he dicho pero ayudo a empresas (y profesionales), que trabajan principalmente en oficina, a hacer su trabajo diario entre 1 y 3 horas menos. Depende de la persona, y del trabajo, claro.
Verás, cualquier persona puede hacer su mismo trabajo, en una hora menos. Todos los días.
Eso no tiene mucha dificultad.
Te lo digo porque es lo que enseño en mi día a día. Y estoy harto de verlo.
Aprenden cómo hacerlo, a través de técnicas y sistemas de trabajo adaptados a la persona. Y en sólo una jornada completa o dos medias jornadas.
En pocas horas, construimos el sistema de productividad personal de cada persona. Y al terminar la formación saben bien cómo van a trabajar para mejorar su productividad.
Siendo ellos los que lo deciden, de entre todas las técnicas que vemos.
Bien.
Paso siguiente en la reducción de la jornada laboral
El caso, es que han comenzado por reducir su jornada laboral en una hora.
Que no es ninguna tontería.
Si consideramos que sólo ha sido necesaria una formación de una jornada de trabajo.
En la que en realidad, ni siquiera abordamos la reducción de la jornada. Sino la mejora de la productividad individual.
El caso es que después hay una segunda (y última fase) opcional.
Esta es un poco más larga.
Porque es en la que trabajamos específicamente la reducción de la jornada laboral.
Requiere de una estrategia personalizada, seguido de una fase de prueba y de algunos ajustes finales.
Nada del otro mundo, por otro lado.
Pero aquí es verdad que trabajamos durante varias sesiones, durante varios meses.
En 6 meses volveremos a hablar.
Y si quieren dar otro paso más… nos planteamos reducir a 6 horas la jornada, durante 2 días a la semana.
Habrá que atar muy bien qué es lo que debe suceder en esos 2 días de 6 horas de trabajo.
Y ¿qué crees que pasará?
Pues que posiblemente convertirán a la empresa, en un lugar donde el mejor talento quiera trabajar.
Porque los números, les van a salir. Y no van a dar marcha atrás.
Y te aseguro que sé de lo que estoy hablando…
He sido un profesional que durante años, entraba y salía de noche de la oficina. Y reducir mi jornada de trabajo, junto con ir implementado técnicas que fui aprendiendo, desarrollando y probando, es lo que me hizo poder hacer el triple de trabajo, en poco más de la mitad de tiempo que antes.
Esa mejora radical, en mi productividad profesional, fue el motivo por el que pasé casi todos los meses a ser reconocido como el mejor Director de Proyectos del mes.
La misma razón por la que siempre me han dicho: “––no sé como te puede dar tiempo para hacer tantas cosas”
Y es justo lo que enseño a los profesionales que trabajan toda o buena parte del día en la oficina. Y les sirve para reducir su jornada de trabajo entre 1. Y 3 horas. Dependiendo de lo que haga, y su nivel.
Ojo, esto de lo que te hablo, es en la formación básica inicial. Que es la que no está orientada a reducir la jornada laboral.
Mis formaciones las adapto a las necesidades de la empresa, de su sector, de su gorma de trabajar, de sus profesionales.
Pero por darte unas pinceladas te puedo contar algunas de las cosas que suelo enseñar.
Son estas:
⇒ La diferencia entre la jornada normal, la jornada según la ciencia, y la jornada de las personas más productivas. Sólo esta técnica, que conlleva pequeños cambios, permite ahorrar 1 hora de trabajo, fácilmente.
⇒ Una autentica clase magistral sobre las distracciones. Y la manera de librar a tu mente de ellas. Porque voy al fondo, destripándolas. Para que por fin dejes de perder tu tiempo, en estupideces.
⇒ La forma de trabajo más concentrada que conozco. Y que debería formar parte de las políticas de toda empresa.
⇒ La técnica que si no la empleas, te va a resulta casi imposible (porque e slo que veo en todas las empresas) ganar mucho tiempo de trabajo de mayor calidad, enfocado y productivo.
⇒ El pequeño detalle de la productividad, y el gran error que cometemos, por el que empezamos el partido de cada día, perdiendo por goleada.
⇒ El sistema completo de planificación (y priorización) , que te va a servir para acabar tu trabajo antes. Y el sistema reducido, para hacerlo aún en menos tiempo. Te lo cuento con todo lujo de detalles,
⇒ El error diario, que ninguna persona improductiva, se ha planteado trabajando en su vida. A diferencia de las personas más productivas, que siempre lo hacen.
⇒ Los 5 hábitos que te ayudan a hacer lo mismo, pero en menos tiempo. O dicho de otro modo, cómo rendir más, mientras trabajas. No es necesario aplciarlos todos. Un par de ellos, pueden hacerte ganar más de una hora por sí mismos, en poco tiempo.
⇒ los 3 micro hábitos que debes llevar acabo, siempre que tengas que continuar con una tarea, en otro momento. De lo contrario, inevitablemente vas a perder tiempo.
⇒ El pequeño detalle, que debes tener en cuenta en tu planificación de cada tarea… para que no se te vaya al traste, todos los días…
⇒ Los 7 errores más comunes que cometemos, esos días en los que no estamos siendo tan productivos como nos gustaría. Y que al saberlo, vas a poder evitarlo y poder volver a ser eficaz con tu tiempo de trabajo. Es una masterclass en sí misma, sobre las errores que te impiden ser productivo. Y que debes tener siempre anotados para recordarlos.
⇒ Los 3 tipos de tareas, más importantes de tu día. Y que necesitas saber para poder planificar correctamente. Para que tengas muchas garantías de al final del día decir, hoy también: –¡lo conseguí!-
⇒ Las 3 fases del ciclo de la productividad, y en el orden correcto. Porque las pocas personas que son conscientes, lo hacen en el orden equivocado. Y no les funciona.
⇒ La silenciosa ladrona de tu disciplina. Una vez que la conozcas, le vas a poder parar los pies, para dejar de ser su marioneta. Hasta el punto que vas a poder aprovecharte de ella para cargarte de disciplina.
⇒ Lo anterior, unido con las 4 técnicas para no necesitar tanta disciplina, a la hora de realizar tareas duras, difíciles o aburridas.
⇒ Pequeñísimas acciones, que te permiten almacenar disciplina, automáticamente, cuando no la necesitas. Para que puedas usarla, en los momentos que más te cueste. Probablemente, en las últimas horas del día.
⇒ …..
Estas son sólo algunas de las cosas que podemos ver en mis formaciones. Pero vemos muchas más.
De hecho, antes de nada, estudio vuestras necesidades. Para después enseñaros las técnicas que mejor se vayan a adaptar a vuestra manera de trabajo.
A continuación, te dejo un formulario de contacto, por si estáis interesados en mejorar la productividad en vuestra oficina.
Saludos cordiales,
David Romero
PD1: Lo bueno de ofrecer al personal una jornada laboral algo más reducida, es que la ven como un regalo. Y como además, no quieren volver a la jornada extendida, dan un esfuerzo extra cuando es necesario.
Pd2: Lo malo de esperar a que sea obligatorio por Ley, es que el personal lo ve como un derecho. Entonces ven como normal, rendir algo menos al día, porque trabajan menos horas para ello.
Pd3: Lo malo de esperarse a ser el último, es ir el último. A la empresa a la que se le van algunos e sus mejores profesionales, en busca de mejoras laborales. Y a la que van los menos cualificados para cada puesto.
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