Es bastante sencillo. Sin visión, no hay liderazgo. No hay fotografía final, tan sólo un montón de actividades a realizar. Simplemente, sin visión no hay éxito en el proyecto.
Lo importante no es saber qué tareas hay que hacer, sino tener una visión lo suficientemente clara que cualquiera la puede entender, lo suficientemente compartida que todos los agentes posean la misma imagen final y lo suficientemente trabajada como para que cada uno sepa dónde aplicar su único y especial valor.
Tus proyectos ¿tienen visión? A grandes rasgos ¿esa imagen final y completa de lo que se busca alcanzar? Si la tienen podría no ser suficiente. Si no la tienen, es el momento.
La falta de visión produce resultados malos.
La típica visión no produce mejora.
Una buena visión produce mejora.
Una gran visión produce grandes resultados.
Sin visión, incluso en el mejor de los casos, en el que entregamos o producimos lo que se nos encargó (lo cual se supone que es sinónimo de éxito), el cliente no acaba satisfecho porque no era lo que necesitaba a pesar de ser lo que pidió. Por ello la visión debe ser trabajada por todos, compartida por todos y sentida como algo de todos.
El nivel al que debemos aspirar a trabajar en el proyecto no es el justo como para que nos aprueben al final del mismo el producto o servicio tras haber cumplido escrupulosamente con los requerimientos. En el nivel de visión compartida el equipo somos parte activa de esa gran foto final y conocemos las necesidades estratégicas, la perspectiva y las ideas del cliente.
Todo el equipo deberá participar en la creación de una visión clara, compartida y asimilada. De ese modo:
El equipo se ve inspirado al sentir que su trabajo importa. Esto se traduce en la confianza que da el trabajar en algo en donde se puede aportar un valor que ni siquiera el cliente espera.
Cada miembro del equipo comprende claramente su función y encuentra dónde aplicar su único y exclusivo expertise.
Se crea una gran conexión en la “sociedad equipo-cliente”.
Además, el equipo comprende la nueva dimensión de este modo de trabajo, encuentra la oportunidad de crecimiento personal y con ello la empresa puede asumir y es requerida para retos mayores.
“Sin visión no hay éxito del proyecto”
El equipo deja de estrictamente completar tareas de proyectos para pasar a trabajar sabiendo que su trabajo tendrá un impacto en el negocio del cliente porque lo conoce y porque comprende cómo se integra en su estrategia y sabe cómo afectará a sus resultados.
“La falta de visión evidencia insuficiencia en la comunicación y carencia de reflexión”
La grandeza de crear una visión
“Todos tenemos que visionar una foto del producto final con gran detalle y para ello debemos comprender por qué vamos a hacer lo que vamos a hacer”
La visión del proyecto si es alineada con el desarrollo del negocio del cliente produce las siguientes ventajas:
La creación de una visión compartida con el cliente ayuda no sólo al éxito del proyecto, sino lo que es más importante, al éxito del cliente.
Trabajar con una visión engrandece el trabajo del equipo porque hay mayor motivación, expectativas de mejora personal y de creación de un mejor resultado.
La visión nos da una perspectiva de futuro que se prolonga más allá del proyecto porque incluye la estrategia del cliente. De ese modo podemos crear una foto final clara y alineada con la estrategia del cliente.
Ayuda a las personas y a las empresas a moverse hacia un mismo objetivo y a un exitoso futuro.
La visión evita pérdidas de tiempo y esfuerzos inútiles porque su creación requiere de una reflexión que modele la imagen futura. La visión nos da la dirección hacia esa imagen de futuro.
Promueve la eficacia, ayuda a crecer, limita los malos entendidos y favorece los buenos resultados. Reúne a todos trabajando por un mismo y mejor resultado.
La visión actúa de brújula en el proyecto, hacia el destino deseado y resuelve cualquier duda ante la aparición de otros desvíos.
“Cuando el fallo no es un resultado posible, nada es tan importante como una visión clara, compartida e inspiradora”.
Sin visión no hay éxito ¿Contruimos una visión?
Partir en los proyectos con la creación de la visión es la manera más segura de cumplir con las necesidades del cliente. Es por tanto la mejor forma de obtener los mejores resultados y exceder las expectativas. Después, tocará lidiar con la parte más difícil de una visión, pero esa será otra gran batalla.
Pregunta: ¿Eres consciente de todo el mundo que hay más allá de simplemente ejecutar tareas?
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